Seis propuestas para planta de biodiesel

Seis propuestas para planta de biodiesel

REDACCIÓN AGROPECUARIA

Seis propuestas para la construcción de la factoría de la planta de alcohol carburante que se levantará en la Hoya del río Suárez, están en la caldera principal. Y no propiamente para sofreírse sino para designar varias de las que contengan la mejor propuesta económica. Así lo dio a conocer Alcol SA, la firma responsable de ese proyecto de biocombustible. De acuerdo con Carlos Restrepo Castro, gerente de Alcol SA, las propuestas vienen de Alemania, Brasil, Japón, Suecia y Sudáfrica. Para el directivo, la junta no se inclinará por un solo proveedor, ya que la oferta incluye 240 equipos que tendrán un costo (junto con el montaje) aproximado a los US$55 millones, es decir, 128 mil 700 millones de pesos. La decisión de compra se dará en noviembre, luego de que se cumpla un periplo de 21 días que tiene como finalidad la visita a varias plantas de alcohol carburante en el exterior, como por ejemplo, las de Brasil. Para Restrepo Castro, las obras civiles y el montaje de maquinaria se darán en el segundo semestre de 2007. El gerente de Alcol SA vaticinó que “en diciembre de 2007 o entre enero y febrero de 2008 estará saliendo la primera gota de alcohol en la Hoya del Río Suárez”. La Universidad Industrial de Santander, UIS, será la encargada de los estudios de suelos de los predios donde se construirán la planta y las vías de acceso. Como se recordará, está plantada en Guepsa. El etanol por dentro El etanol es un alcohol líquido compuesto de carbono, hidrógeno y oxígeno que resulta de la fermentación de azúcar o de almidón convertido en azúcar, extraídos ambos de la biomasa. También puede producirse a partir de la celulosa contenida principalmente en los desechos agrícolas, urbanos o forestales. Actualmente se utiliza el etanol para mezclarlo con la gasolina. Las concentraciones de etanol varían generalmente entre 5 y 10%, pero pueden alcanzar hasta 85% para los vehículos policarburantes. Perjuicios y demanda De acuerdo con los expertos, los perjuicios abarcan básicamente dos aspectos. El primero, tiene que ver con la presión de vapor de la gasolina. Lo anterior significa que hay más escape de vapores. La segunda aduce una mayor formación de compuestos oxigenados de alto riesgo como el acetaldehído. Y si en Colombia se quisiéramos sustituir toda la demanda de gasolina y ACPM con biodiesel, se requerirían 40 millones de litros diarios. Esa cantidad es similar a toda la producción actual de etanol de Brasil, uno de los más fuertes en el mundo en ese tipo de combustibles no fósiles y que lo obtienen, principalmente, de caña azucarera.